Quien viaja deprisa, pierde la esencia del viaje.

19.5.13

Un pedacito de Vizcaya…


En esta ocasión, nuestro camino se aleja de nuestras montañas, y nos acerca a Vizcaya, un lugar con el que tenemos una cita pendiente.
Si algo prima en este pequeña escapada, es la ausencia de las prisas. Simplemente, nos dejamos llevar por la serpenteante carretera que  sirve de lazo de unión entre un lugar y otro,  e iremos disfrutando de cada uno de aquellos rincones que a cada momento salen a nuestro encuentro, la frondosidad de sus bosques, el verdor de los prados, la belleza de sus calas y pequeños pueblos pesqueros.  Así, como la elegante arquitectura de sus pueblos de interior, al tiempo que disfrutamos de la amabilidad de su  gente y su rica gastronomía.
En definitiva, una pequeña escapada que nos deja ese regusto, que nos hace pensar en una próxima visita.


San Juan de Gaztelugatxe.



Puerto de Bermeo.

Bermeo.

Mundaka.



Ermita de Santa Catalina.

Elantxobe.



Puerto de Elantxobe.

  Museo Guggenheim -Bilbao-.

Teatro Arriaga.

Callejeando por el Casco Viejo.

Puente del Ayuntamiento.

Puente medieval de Balmaseda.

Plaza de San Severino.

Ayuntamiento e  Iglesia de San Severino.

Ayuntamiento de Güeñes.

Curiosas esculturas.

2 comentarios:

  1. Qué lugar, San Juan de Gaztelugatxe..., para vivir alejado de todo. Abrazos.

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  2. Lo cierto Salome, que valorando el paisaje, cualquier lugar del norte es ideal para vivir. Sin menospreciar a otras regiones, pues cada una tiene su encanto.
    Un saludo.

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